dijous, 3 de desembre del 2009

La Squashsa

"¿No llevan los Rolling una máquina de flippers a los conciertos? ¿No debemos hacer deporte? Yo lo que quiero es que en mi casa pueda jugar al squash. Que mueva un mueble, un poco, corra un estante mínimamente y ya está. ¿No movemos los muebles cuando hay una fiesta? ¿No hacemos más grande el salón cuando queremos bailar? Pues yo quiero jugar al squash. No es tanto pedir. Sólo 7 x 5 metros, y 3 de altura. La altura no es un lujo. La verdad es que no es tanto pedir. Una pared limpia. Otro querrá una cancha, una pista de, no sé, cualquier cosa... no es tanto pedir. Y correr por el pasillo, o un cuarto de baño amplio, con aparatos de gimnasia. No es tanto pedir."

Soriano y Palacios
Europan 6. Viviendas Urban-Galindo. Seis reflejos.

Más cuentos arquitectónicos: aquí.