dijous, 12 de març del 2009

Dislocada

Siento como mi corazón y mis pies me llevan en una dirección mientras que mi cabeza y la gente que me rodea se empeñan en empujarme hacia la contraria. Y ese tira y afloja acaba doliendo. Soy consciente (para ello mi cabeza está en ese bando) de que debo dar esos pasos, que es una pequeña carrera; pero estoy demasiado cansada para caminar. Ahora mismo sólo me apetece volar y arrastrar a mucha gente en mi vuelo. Pero a medida que vuelo más alto, el tirón es más fuerte y hace más daño. Tengo que parar esto. Sé que basta con dar esos pasos y al llegar a meta poder volar sin que nadie me lo impida.